La prueba de Papanicolaou, también conocida como citología vaginal o Pap, es el estudio ginecológico más habitual. La ginecóloga toma muestras de las células epiteliales que se encuentran en la zona de transición del cuello uterino.
En Casa de la Luz disponemos de dos tipos de preparación para el estudio de la citología. El más común y la citología líquida.
La citología líquida es una técnica que consiste en el uso de un cepillo único que abarca las tres áreas de la triple toma. Una vez hecha la toma, en lugar de extenderla directamente sobre el cristal portaobjetos, se introduce en un bote con líquido conservante. En el laboratorio la técnica difiere del Papanicolau habitual en que, tras una serie de procesos, se filtran las células y se transfieren al portaobjetos en una capa muy fina, cuyo espesor contiene sólo un nivel celular (monocapa), representativa de la totalidad de la muestra. Esto hace que el examen de la muestra sea más fácil y precisa que en Papanicolau convencional.
La citología no duele, es una técnica muy sencilla que dura 5 minutos y que, normalmente, forma parte de la revisión ginecológica aunque la toma de la muestra puede hacerla una enfermera cualificada.
Con los resultados podemos conocer el estado hormonal, identificar alteraciones inflamatorias y orientar sobre un posible diagnóstico de cáncer cérvico-uterino. Una vez recibida y vista, Casa de la Luz le envía los resultados para que el cliente los tenga en su posesión.